Philp K. Dick es considerado actualmente como uno de los mas importantes escritores de ciencia ficción. Su obra a sido alabada por la crítica y tras de si deja una fuerte influencia en las nuevas generaciónes de escritores del genero. A continuación presentamos un árticulo de visión personal que sobre él y su obra tiene uno de nuestros colaboradores y fan acerrimo de Dick..

“Halcones Nocturnos”..

Así se titula el famoso cuadro de Edward Hopper. Es un cuadro soberbio.

Nunca he sido muy afecto a la pintura ni a la escultura y una obra dePiccaso, Mattise, o Paul Klee podrían pasar desapercibidos por mi fácilmente. Con Edward Hopper no ocurrió así.

Sus pinturas ocultan por lo general una intensidad muy emotiva, cubierta por un extraño halo de serenidad y silencio: Calles al atardecer donde lo único que podría oírse es el roce de un suave viento de otoño. la tranquilidad de un paisaje donde una casa vieja de madera mira serena a un cielo que presagia la llegada del invierno.

Cuadros así descritos parecerían provenir de un alma plácida. Pero hay algo mas, algo muy difícil de describir con palabras. Es ese algo lo que convierte a Hopper en un artista inusual.

Sus cuadros inspiran una melancolía extraña y ocultan un drama interno difícil de identificar. El cielo, la tarde y el silencio acaban por conjugarse para dar paso a una sensación de tristeza, de soledad espiritual, da algo lejano que se a perdido o se perderá.

“Halcones Nocturnos” es uno de esos cuadros pero su sensación es mas intensa. La noche es tranquila, solitaria, profundamente solitaria y no necesitamos reloj para saber que son altas horas de la madrugada. En la esquina se encuentra un casi abandonado café con 3 comensales dentro y un chico rubio que los atiende. Recargados en una barra se encuentra una pareja: un hombre con sombrero y traje y una mujer. Dan la sensación de no haberse visto en mucho tiempo, sin embargo su encuentro no parece traer recuerdos felices. El parece haber acabado de contarle algo a ella. Ella parece nada tener que opinar. Otra vez la melancolía. Esa melancolía extraña de la que hablaba antes: Si imagináramos que algo hubo entre ellos, ese algo hace ya tiempo que se acabo. Ahora viven en mundos independientes, en realidades opuestas...tal vez recuerdan el mundo que compartían antes.

La melancolía de ese encuentro se ve acentuada por la abandonada calle, apenas iluminada por la blanca luz del local. Tal pereciera que la gente dentro del café es la única que habita esa ciudad. Dan la impresión de vivir dentro de una pecera brillante y limpia .

Detrás de la barra se encuentra el chico que atiende. No veo nada de particular en él. Se limita a servir, sin importarle nada mas. De seguro toma las cosas como vienen.

Pero el tercer cliente... Ah, ese tercer cliente desentona con el cuadro. Él si da la sensación de estar en un verdadero problema, de estar asustado y confundido. Su cara no se ve, pero no necesitamos verla para saber que esta tenso y desesperado.

Da la idea de saber algo de ese mundo que los demás no saben... algo que a cambiado y que solo a podido notar él.

Él también esta solo, pero su soledad no es interior. Es una soledad muy diferente. Es la soledad del que se encuentra en algún lugar extraño y ajeno del cual no sabe si ha de volver. Es una parte del cuadro que se me antoja verdaderamente aterradora...

Este cuadro, “Halcones Nocturnos” es pues, de Edward Hopper.

Sin embargo cuando lo veo, no pienso en él.

Cuando veo cualquiera de sus obras en realidad no pienso en Hopper. Nada se de Hopper.

¿Saben en quien pienso?

Pienso en Dick. En Philip K. Dick

Y es de él de quien quiero hablarles a continuación...

¿SUEÑAN LOS ANDROIDES CON OVEJAS ELECTRICAS? Edhasa 1981

Blade Runner es la película basada en la novela de Philp K. Dick titulada ¿Sueñan los androides con ovejas electricas?

La guerra mundial a devastado al planeta. Rick Decard, policía dedicado a perseguir simulacros (androides muy similares a los humanos) y destruirlos, se entera de que seis de estos andan sueltos. Llama a su superior para pedir la misión y descubre con sorpresa nadie en el cuartel nadie conoce a ningun Rick Decard.

Para Decard, la pesadilla esta a punto de comenzar ...

Descubrí las obras de Dick cuando contaba con 19 años. Desde siempre me había gustado la ciencia ficción y la leía con avidez desde casi los ocho años. Las ideas especulativas y rompedoras que definen a este genero en particular, siempre me habían subyugado. Había leído a Asimov (todos comenzamos con él), a Clarke, a Simack, a Heinlein... pero nunca a Dick. Es mas, Dick ni siquiera llamaba mi atención. Fue cuando vi Blade Runner que quise leer algo de su obra.

Blade Runner es una película fascinante. Imagen, música e historia se conjugan para darnos una visión totalmente diferente a todo lo que habíamos visto antes en el cine. Esperaba encontrar lo mismo en la obra de Dick.

Inicie con La Penúltima Verdad (Ed. Roca), la historia de un engaño en masa por círculos de poder que manejan los medios a su antojo. El libro me pareció bueno. No era una obra maestra ni nada que pudiéramos calificar de extraordinario, sin embargo fue una buena catapulta para animarme a leer lo demás.

El siguiente paso lo di con Fluyan Mis Lagrimas Dijo El Policía... una historia que podríamos calificar ya de 100% Dickiana.

Mentiría si dijera que no fue extraña para mi.

Acostumbrado a leer cosas menos introspectivas (la ciencia ficción que leía hasta entonces no se distinguía por ser muy profunda en otro aspecto que no fuera el científico) el libro me pareció raro y a veces poco coherente. En especial una escena que aparece casi al final de la novela donde Felix Buckman, jefe de una policía aplastante y coercitiva llora después de que un expendedor de gasolina le muestra una fotografía de sus hijos.

Lo sorprendente es que, en realidad, el policía nunca lloró en esa parte del libro. Por alguna razón quedo en mi mente grabada la imagen de un Felix Bukman sonriendo con tranquilidad y con los ojos empañados en lagrimas. Años después me enteraría del por que de esa imágen.

A continuación leí pues ¿Sueñan Los Androides Con Ovejas Eléctricas? libro en que se baso la película Blade Runner y el cual tenia muchas ganas de leer. Lo hice, y aunque me gusto bastante ya tenia yo bastante grabado en mi mente al filme. En otras palabras, no fue lo mismo y no me permitió disfrutar de la obra tanto como hubiera yo querido.

Poco a poco se comencé a conseguir mas novelas del autor: Ubik, Ojo en el Cielo, Los tres Estigmas de Palmer Eldritch...este ultimo libro tarde bastante tiempo en poder disfrutarlo. Me parecia difícil y enredoso. Casi podría decir que me daba una espantosa sensación de desesperación parecida a la que otorga la inmovilidad total.

De esa manera comencé a conocer buena parte de la obra de Phip K. Dick y a reconocer en ella bastantes puntos en común, temáticas recurrentes, personajes similares, imágenes retomadas, variaciones de un mismo tema...comencé a reconocer una especie de constante en las novelas de Dick, una ética y un sentimiento casi compulsivos en él. Tal pareciera ser uno de sus propios personajes aparecidos en su relato Algo Para Nosotros, Temponautas... donde un grupo de viajeros espacio-temporales se ven atrapados en una especie de rizo paradójico en el tiempo, por lo cual viven una y otra vez la misma experiencia sin poder ellos liberarse de esa maldición.

Con Dick ocurría algo similar... sus novelas eran diferentes, si. Pero en muchas el trasfondo parecía ser el mismo. Y a veces ni eso. La mayoría de sus personajes protagonicos resultaban ser casi siempre un trabajador de clase media dedicado a la venta o a la reparación de aparatos, aplastado la mayoría de las veces por un sistema opresor que limitaba sus posibilidades de autodesarrollo y felicidad. Ni que decir sobre sus relaciones maritales, que por lo general resultaban un fracaso. De autoestima baja y muchas veces con personalidades esquizofrénicas, estos personajes se veían imersos en situaciones aparentemente sin relación directa con ellos. Como ejemplo tenemos a Herb Asher, encerrado y apartado de todos en su domo del sistema estelar CY30-CY30B, indiferente a todo lo que no fuera si mismo y las canciones de la cantante Linda Fox. ¡Quien le diría que acabaría siendo el padre de Dios y carta clave en la transformación la vieja REALIDAD humana!

FLUYAN MIS LAGRIMAS, DIJO EL POLICIA Ed. Acervo 1976

Fluyan mis lagrimas... es una novela que causó controversia dentro de la ciencia ficción. Muchos la consideraron simbolo de la decadencia literaria de Dick, sin embargo quedo como finalista al premio Nebula de su año. Una obra 100% Dickiana, Fluyan mis lagrimas... resulta ser todo un compendio temático de su obra.

Es 1998. Jason Taverner es un famoso showman de la television con mas de 30 millones de telespectadores que ven su programa. Nadie es tan conocido como él. O era...

Despues de un fallido atentado Jason Taverner a despertado en un destartalado cuarto de hotel, con veinticinco mil dolares en el bolsillo pero sin ningun documento de identidad. Esto no causaria ningun problema, a no ser que el mundo donde a despertado no es el que conocia.

Covertido de la noche a la mañana en un perfecto extraño, Taverner se encuentra solo y abandonado en una realidad diferente donde la fuerza policial es en verdad la unica ley, donde los campus universitarios se han convertido en prisiones para los estudiantes y donde el no disponer de papeles que acrediten la propia identidad es equivalente a no existir.

Si se fijan, escribí REALIDAD con mayúsculas.

Ese es uno de los temas capitales de Dick. Realidades falsas, realidades simuladas, realidades trastocadas, realidades modificadas, realidades privadas, realidades controladas, realidades alternativas...Casi no hay novela de él que no toque ese tema.

¿Pero por que esa obsesión con la realidad? Parece una temática casi compulsiva en su obra.

Pero presentemos antes unos ejemplos para saber de lo que estamos hablando:

En su obra El Hombre En El Castillo nos encontramos con una realidad alternativa donde el eje a ganado la guerra a los aliados. Dentro de la misma obra, un escritor llamado Hawthorne Abendsen ha escrito otra novela alternativa que resulta ser la de nuestra propia realidad. En Sueñan los Androides... la simulacro Raquel (una especie de androide tan similar al humano que se podría confundir con uno) tiene implantada en su memoria una serie de recuerdos que no le pertenecen. Su realidad ha sido siempre, pues, falsa.

En Tiempo Desarticulado, Ragle Gumm, el protagonista vive imerso sin el saberlo en un mundo de 1959 que en realidad no existe. A su alrededor todo es simulado. El verdadero año es 1998 y la Tierra y la Luna se encuentran a la mitad de una cruenta guerra donde Ragle Gumm es una pieza de vital importancia.

Podría citar mas ejemplos: La Invasión Divina, Fluyan Mis Lagrimas..., Los Tres Estigmas de Palmer Eldritch, Ubik, etc., pero hablaremos de ellas después.

Así, como pueden ver, la realidad es un tema predominante en Dick. El otro se refiere a la vieja pregunta que todos no hemos hecho algunas ves: ¿Que es el hombre? ¿Que podemos definir como un hombre o en su caso como humanidad?.

Si se fijan bien, esta pregunta no es mas que una variación del primer tema de Dick. ¿Cual es pues, la realidad del hombre? No la realidad exterior, sino la interior, la que lo define y que le da concepto. Averiguar eso SI que es difícil.. Y mas en los mundos de Dick.

Ahi tenemos como ejemplo su cuento titulado ¡Impostor! donde el personaje central se enfrenta al dilema de averiguar si es un verdadero humano o un simulacro tan real que cree serlo. O para retomar un ejemplo anterior, a Raquel, cuyo descubrimiento de falsas memorias en su mente la lleva a la triste verdad de ser solo un simulacro.

Si se fijan bien, en la frase anterior dije “...ser solo un simulacro.”

Sin embargo el meollo de la situación es que un simulacro tiene en realidad todo aquello que puede tener un ser humano, salvo que son un poco mas fuertes, mas hábiles, mas inteligentes...y con menos tiempo de vida.

¿Que tan diferente puede ser algo que es interiormente igual a nosotros? ¿Importa en realidad la forma para poder ser un humano? ¿Que es lo que importa pues?

Estos dos temas son los que nos permitirán seguir de cerca el pensamiento de Dick y llegaremos, tal vez, a conclusiones sorprendentes...

EL HOMBRE EN EL CASTILLO Ed. Minotauro 1962

El Hombre en el Castillo es una novela de ucronia. Ambientada en en un 1962 alternativo donde el eje (Alemania, Italia y Japón) gana la segunda guerra mundial. Dick nos ofrece una visión realista de unos Estados Unidos fragmentados y controlados por el enemigo. No hay en esta novela efectismos dramaticos de sublevaciones o heroicidades patrioticas.
Mucho de lo interesante de esta obra es que no se centra en un argumento en particular y prefiere explorar y dar una vision social de las interacciones entre los diferentes personajes, sus puntos de vista y la particular situación que se vive en ese mundo. Tenemos por ejemplo el extraño gusto de los japoneses victoriosos, atraidos por las costumbres y objetos de la "cultura californiana" (Relojes de Mickey Mouse, posters de viejas películas, etc.) y que no dudan en pagar altas cantidades de dinero por obtenerlas.

En este mundo viven pues Robert Childain, anticuario de profesión, el señor Nobusuque Tagomi, empresario japones que sufrirá un "movimiento lateral" hacia otra realidad alternativa (la nuestra), Hawthorne Abendensen, escritor y autor de "La langosta se a Posado" una novela de ciencia ficción escrita por medio del uso del I-Ching y que describe un mundo alternativo donde el eje perdió la guerra, El señor Baynes, un judio que se hace pasar por Noruego para sobrevivir y muchos otros personajes mas que nos muestran un interesante tapiz que bien vale la pena disfrutar.

Antes de continuar con el tema de Dick y la realidad, analicemos un poco a sus personajes. Como ya había dicho antes, hay varios personajes recurrentes en muchas de sus novelas. Ya hablamos también de su personaje protagonico preferido: el trabajador de clase media con el que de seguro se identifica el mismo Dick. A este personaje hay que seguirlo muy de cerca durante el transcurso de sus novelas (que suelen tener muchos personajes) porque este será el que logre comprender el verdadero punto de la situación.... y no solamente a nivel desarrollo, sino el mensaje tácito de la obra, lo que intenta hacernos comprender Dick.

Sin embargo, por lo general siempre es otro personaje el que se ve transformado por este contacto místico. Así es, místico es la palabra...pero no nos desviemos del tema pues hablaremos de todo esto después. Otro de estos personajes recurrentes son las mujeres. Por lo general podremos encontrar dos tipos de mujer en las obras de Dick: a) la esposa de protagonista, por lo general una mujer sumida en el tedio árido de la rutina. y b) Una joven de cabello negro que resultara ser la motivadora e influenciadora del protagonista

Por lo general, el protagonista suele sentir una fuerte atracción por esta figura que resulta la mayoría de las veces, mas dinámica y activa que él. Acabara convirtiéndose, pues, en el principal motor y motivo del personaje protagonista. Esta atracción, nunca esta de mas señalarlo, por lo general siempre esta éticamente equivocada. Según sea el caso, por unos días el protagonista saldrá del tedio de su rutina marital o habitual para sentirse vivificado por la nueva relación que sostiene. Indudablemente esa relación lo meterá en muchos problemas pero también lo hará dar lo mejor de si, para finalmente volver a reunirse con su antigua esposa o antigua vida, pero ya con una visión diferente de las cosas, de la relación y de la realidad.

Esta relación es muy importante porque es la que nos lleva de lleno a lo que Brian W Aldiss llama “Compromiso- con -el -pasado” en las obras de Dick y que analizaremos después.

Esta “chica de cabello negro” (por lo general una muchacha muy joven pero sociológicamente madura) aparece en casi toda la obra de Dick.

Es Mary Ann, la chica psíquica de Los Jugadores del Juego de Titán; es Raquel , la chica simulacro de Sueñan los Androides...; es Pris, la chica esquizofrénica de Podemos Construirle; Es Linda Fox, la cantante de La Invasión Divina; es Mary, la protagonista de Mary y el Gigante (novela que NO es de ciencia ficción... y muy mala a mi punto de vista).

Sin embargo hay algo que podemos notar fácilmente en la mayoría de todos los personajes recurrentes de este autor: Todos son Dick.

Y no me refiero a que son creados por él. Me refiero a que son una de las facetas de Dick.

Tal parece que se hubiera fragmentado y todos sus personajes son una parte-replica de sus pensamientos y filosofía. No hay un desarrollo autónomo de sus creaciones. Es raro el que difiere totalmente de la personalidad de Dick. Los lectores de este autor verán pues, que la mayoría de ellos no son en realidad “el villano” de la historia ni son por completo malvados. Los que si lo son nunca son totalmente desarrollados.

Ese es el caso de Ferris F. Fremont, el anticristo (F.F.F. = 666) y presidente de unos Estados Unidos de América fascista y represivo que aparece en “su” novela Radio Libre Albemut. Y ya que hablamos de ella y de sus personajes tengo una ligera sospecha que me gustaría mencionar.

Radio Libre Albemut (Ed. Ultramar) es una manuscrito que entregó Tim Powers, escritor y amigo de Dick, a los editores de su obra. Se le considera la versión primitiva de Sivainvi (Valis, en ingles), la ultima novela de Dick y le fue entregada para su colección privada antes que Phil muriera.

Leyendo atentamente la obra uno se dará cuenta que muchos de los personajes que aparecen en esta novela no encajan en el esquema de las anteriores. Tienen personalidades comunes. Existen otros que a kilómetros se descubren que son “Dick puro”.

Creo que parte de esta obra no esta escrita por Dick sino por Powers. Creo que la completó en realidad.

La novela no es mala (pocas obras de Powers lo son) y mantiene el interés durante 209 paginas.

Pasemos ahora a otra tema.

Tal vez la mejor obra de Dick y la que mejor refleja - a mi manera de ver-, el universo interior Dickiano.

El Marte que Dick nos describe en esta novela es un rojo y arído paisaje, simbologia del tedio y la pobreza espiritual. En este Marte viven los colonos humanos como Jack Bohlen, un hábil mecánico especialista en reparaciones de artefáctos averiados (en Marte todo escasea y debe cuidarse). Para Bohlen y su esposa, la vida pasa lenta y pesada en un mundo magro y esteril en todos los aspectos. Sin embargo, para Arnie Kott, un corrupto dirigente sindicalista, Marte tiene el simbolo de dolares en un lugar en especial: La cordillera Franklin Delano Roosvelt, donde las Naciones Unidas piensan ubicar una nueva colonia habitacional. En medio de ellos, un grupo de personajes mas: Leo Bohlen, padre de Arnie y empresario con las mismas espectativas de Kott; Norbert Stainer, contrabandista de objetos de lujo y padre de Manfred, un niño autista que vive en su propio infierno individual, el infierno del Gubbish; Silvia Bohlen, la esposa de Jack, desidida a cambiar su tediosa y frustrante vida; el Dr. Glaub, terapeuta de la clinica Ben Gurion y encargado de Manfred... y finalmente estan los Bleekmen, los primitivos habitantes de Marte (simbologia de los abrígenes Australianos) que conocen un secreto que podria cambiar el orden del tiempo y el destino.La vida de todos ellos se enlazara cuando Steiner decida acabar con su vida arrojandose frente a un camión y desate un extraño efecto domino que los envolvera a todos.

Tiempo de Marte es, pues, una obra de Dick que no debe dejarse pasar

Cuando leí Tiempo de Marte (de. Edhasa) me encontré con que es antecedida por una introducción escrita por Brian W. Aldiss donde hace un análisis rápido de la obra en cuestión y otras novelas de Dick. Es con mucho el mejor estudio que he leído sobre Dick. Desnuda totalmente el simbolismo de su obra y nos lleva a una comprensión de su punto de vista sobre la vida.

Según Aldiss, la obra de Dick la comprenden estos dos Bloques: “Ansiedad-por-la-realidad” y “Compromiso-con-el pasado”.

Del primer bloque ya hablamos algo anteriormente. ¿Pero que es esa Ansiedad por la Realidad que siente Dick? ¿De que se deriva? Tal vez la respuesta se encuentra en un viejo articulo escrito por él hace tiempo titulado: “Si encuentran ustedes este mundo mal, deberían ver algunos de los otros”.

En él, Dick confiesa haber experimentado un “movimiento lateral”. Veamos a que se refiere.

En la novela El Hombre en el Castillo, el señor Tagomi pertenece a un mundo alternativo donde los aliados han perdido la segunda guerra mundial (creo que ya lo había mencionado antes, ¿no?). En una parte del libro, él se encuentra sentado en un soleado y tranquilo parque. Esta mirando con atención una joya moderna hecha a mano y con diseños abstractos. Cuando vuelve su atención al parque se siente aterrorizado. Nada parece haber cambiado a su alrededor sin embargo hay algo que no encaja. Tagomi ha sido transportado a nuestro mundo por unos instantes, un mundo donde el eje perdió la guerra.

Esta explicación nunca se da en el libro y confunde a muchos de los lectores de Dick. Nadie sabe que es lo que a aterrorizado al Sr. Tagomi cuando leen esas paginas.

Dick lo explica en su artículo: Tagomi a experimentado un “movimiento lateral”.

Según Dick, en 1974 tuvo una experiencia similar a la de Tagomi. En ese año le administraron pentotal sodico para extraerle una muela y a raíz de eso, cuando regresaba a su casa fue asaltado por un recuerdo y una sensación muy reales. Un recuerdo de un mundo oscuro, un estado policial sembrado de prisiones y campos de concentración. Este mundo es el que se ve retratado en Fluyan mis lagrimas dijo el policía, Radio Libre Albemuth y La Invasión Divina.

Lo interesante de este recuerdo es que no se refería a ningún pasado distante. Parecía, mas bien, un presente diferente. A este proceso de recordar le llaman en griego anamnesis, la perdida del olvido. El que ha perdido el olvido, puede pues, recordar.

En ese mundo recordado por Dick la iglesia cristiana es ilegal y por lo tanto perseguida. Sus elementos son subversivos y revolucionarios buscados por el gobierno y pasados muchos por las armas. Dick recuerda haber pertenecido a uno de estos grupos.

¿Que ocurre pues? ¿Existen acaso muchas realidades? ¿Es la nuestra una realidad falsa o modificada? Dick quiere que lo tomen en serio. Afirma no bromear en lo absoluto.

Y tal vez tenga razón en parte. Su obra esta muy enfocada a esta “Ansiedad por la realidad” que nos menciona Aldiss.

Por supuesto que es una idea emocionante , sin embargo yo dudo mucho de ella. Es notorio en las obras de Dick, si se sigue una cronología de sus ediciones, como esta va tendiendo de una ciencia ficción “común” (permítanme definirla así, por favor) a una ciencia ficción totalmente mística. Un claro síntoma esquizoide.

Tal parece que a Dick le va ocurriendo lo mismo que a sus personajes, su realidad va poco a poco desmoronándose a su alrededor. Dick no puede creer que eso venga de dentro de si, por lo tanto tiene que venir de fuera. Comienza a convertirse también en un paranoico.

RADIO LIBRE ALBEMUT Ed. Ultramar 1990 (Autor: Philip K. Dick y...¿Tim Powers?)

Considerada como la version primitiva de Sivainvi, su ultima novela publicada en vida, Radio Libre Albemut nos conduce a un mundo donde el estado policial rige en unos Estados Unidos gobernado por Ferris F. Fremont, un presidente ultraconservador y tiranico que no duda en sumir a la población en una gigantesca paranoia de "caza de brujas" con el pretexto de detener el avance comunista. En este mundo vive pues, el mismo Philp K. Dick, escritor de ciencia ficción y objeto en la mira del APA una organización gubernamental formada por jovenes entusiastas y patrioticos dispuestos a todo por defender a su pais del avance Ruso. Es tambien el mundo Nicholas Brady, amigo de Dick y receptor de los mensajes de una extraña entidad llamada por el SIVAINVI que bien puede ser el mismisimo Dios. Misticismo cristiano y una buena historia de ciencia ficción se conjuga en esta historia mitad ficticia, mitad autobigráfica que es indispensable para comprender mejor el mundo de Dick.

En Radio Libre Albemut hay una parte que es casi autobiográfica. En 1970 alguien entro a su casa y esculcó todo el lugar. Phil juraba que había sido la CIA. Esto aparece en la novela, con el mismo Philip K. Dick como protagonista.

En este mismo año Dick comienza a tener experiencias místicas que influirán fuertemente en su vida y en su obra. Me imagino que mucho tenia que ver sus “experiencias” con drogas.

A Dick siempre se le ha asociado con las drogas. Sus novelas tratan frecuentemente sobre ellas, léase Fluyan mis lagrimas... donde la culpa de todo el desface de la realidad lo tiene una sustancia y en Los Tres Estigmas de Palmer Eldritch donde un ser verdaderamente aterrador modifica las realidades psicológicas por medio de una droga en especial. Esto sin mencionar otras muchas mas o varios relatos como “Los días de Perky Pat” o Espero Llegare Pronto.

Bueno, el que Dick escriba sobre drogas no lo convierte en un drogadicto. Además, sus novelas siempre apuntaron a condenarlas. Las consideraba peligrosas pues falseaban la realidad, y por supuesto, destruían. En Radio Libre Albemut, el personaje Dick se queja de que desde que Harlan Hellison dijo que había escrito su relato “La fe de nuestros padres” bajo el efecto del LSD para sus famosas Visiones Peligrosas, nadie lo bajaba de vicioso. Lo malo es que esa es una de las partes que sospecho escribió Powers.

Yo no puedo inclinar mi opinión hacia ningún lado. ¿Fue Dick drogadicto o no?. Powers lo conoció y parece negarlo. Yo nunca lo conocí.

Sin embargo, ¿Es esta Ansiedad por la realidad que aparece en las obras de Dick un claro derivado de esta experiencia?.

Por supuesto que no. En 1957 publicó Ojo en el Cielo y en 1959 Tiempo Desarticulado, novelas donde su tema seminal sobre la Realidad son los básicos pilares de la historia. Cito estas dos solo por mencionar algunas. Recordemos además que su experiencia ocurrió en 1974 y que sus “crisis” místicas mas fuertes tuvieron lugar en 1970.

¿Entonces?

Bien, algo de eso intentare explicarles en el próximo artículo.

Continuara...

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